Primer premio del concurso Internacional convocado por el Ayuntamiento de Baghdad para la Revitalizar y desarrollar el Distrito de Adhamiya.
Plantearnos cual debe ser la naturaleza de una intervención en una realidad tan compleja, distinta y traumática como la de Bagdad, es el gran reto de este proyecto.
En ese sentido tuvimos claro desde el principio que nuestro proyecto debía ir más allá de la propuesta puramente física. Experiencias anteriores nos hacían pensar que, aunque debíamos proporcionar una imagen-objetivo atractiva capaz de aglutinar intereses y generar expectativas, lo que era realmente necesario era plantear una metodología que permitiese la posibilidad de avanzar de una forma sostenible con un proyecto complejo en un lugar tan desarticulado.
De igual manera era preciso insistir en la necesidad de un sistema de gestión ágil y que reforzase la capacidad del Ayuntamiento de Baghdad para liderar un proceso de desarrollo que satisfaciese las necesidades de la comunidad local y proporcionara el desarrollo sostenible en términos sociales, económicos o físicos frente a una previsible presión de los intereses privados.
Así, nuestra propuesta para Adhamiya es un proyecto de diseño urbano, pero también es una metodología interdisciplinar de largo plazo y un proceso de gestión.
Hablar de un proyecto de rehabilitación integral plantea un modelo de acción que trasciende la arquitectura o la definición del espacio público en un sentido estrictamente físico. Debe incorporar a los habitantes del lugar, a los distintos agentes sociales, políticos, religiosos y económicos y plantear mecanismos de activación de la economía vinculada a la ciudad respetando sus idiosincrasias.
Nuestro proyecto planteaba programas de trabajo y comunicación orientados a avivar complicidades entre los agentes económicos y sociales involucrados en el proceso.
Planteamos un modelo radicalmente integrador que considera que los habitantes, las personas, su vida y su memoria sobre los lugares, son el principio y el fin de la arquitectura. Dotar a este concepto de un método de gestión que lo haga competitivo con otros modelos aparentemente más lucrativos y cortoplacistas, es la única manera de preservar las ciudades y la fragilidad de la preciosa vida en ellas instalada.
Entendemos el distrito de Adhamiya como una ciudad en un contexto metropolitano y territorial más amplio. El Tigris es elemento generador y estructurador del territorio y la ciudad. El río, tradicional corredor de movilidad, será el que permita construir y proyectar una imagen unitaria y legible del gran Bagdad del futuro.
