Este edificio se plantea con la voluntad de recrear en términos contemporáneo, el positivo espíritu creativo que se intuye en el proyecto original del edificio modernista del arquitecto Ignasi Mas i Morell.
Quisiéramos poder mantener, reinterpretándola, esta manera tan particular de mirar el mundo y entender la arquitectura. Este carácter lúdico y desinhibido que era capaz de jugar con las hojas de acanto de la arquitectura clásica, ponerlas como remate de barandilla, haciendo que parezcan algo totalmente diferente y además hacerlas de cerámica y brillantes.
Nosotros querríamos hacer arquitectura modernista contemporánea, mediterránea, lúdica y seria a la vez. Espacios claros y luminosos, con color y con la vegetación como tema principal. El edificio de Ignasi Mas i Morell utiliza las flores y los motivos vegetales como elementos ornamentales. Nuestra propuesta plantea que la fachada de la nueva parte a través de la cual nos entrará la luz y veremos fuera sea vegetal.
En cuanto al programa funcional planteamos mantener la entrada principal a la puerta de la torre de la calle Santa Clara y un posible el acceso a la sala polivalente por la otra puerta de la fachada principal del edificio.
En la planta baja de la torre se ubica el vestíbulo, conectando con la zona infantil, con la zona de revistas y con la sala polivalente, espacios todos ellos situados en planta baja en cota de la calle Santa Clara. Desde el vestíbulo sale la escalera que nos lleva al área de fondo general, construida excavando debajo del actual patio.
En la planta piso están las zonas de trabajo interno, despachos y zona de descanso del personal, con acceso independiente desde la zona infantil.
La zona de revistas y prensa diaria es en realidad el único elemento volumétricamente nuevo que incorporamos en el edificio. Ocupa una superficie del 15% de la del patio actual y la entendemos como un elemento muy transparente y ligero, se relaciona muy bien con el lenguaje de la parte central del edificio, construida a base de ventanas.
El espacio de fondo general es un volumen único con una gran fachada abierta a sur y filtrada mediante un sencillo sistema de celos metálico ligero mezclado con elementos vegetales trepadores caducos guiados. La fachada respondería a las necesidades térmicas y de control de luz independientemente de la vegetación, que se considera en realidad como un elemento de acabado y de confort sensorial y visual, aunque a la larga acabaría contribuyendo en un tamaño mucho mayor al confort térmico y ambiental, así como a la renovación del aire y aportación de oxígeno al entorno. En la cubierta del fondo general, o sea en el patio, colocamos unos lucernarios cilíndricos, que, con un sencillo mecanismo motorizado de apertura, a la vez que permiten la entrada de luz natural, con el consecuente ahorro energético, combinados con la posibilidad de abertura de la fachada frontal, permiten una intensa ventilación cruzada y refrigerada por la vegetación de fachada.